El libro de la vida es el más completo y perfecto. En él se halla toda la sabiduría que el hombre necesita para poder sobrevivir de forma continuada y segura.
La profundidad que esconde está por encima de todos los enigmas que se puedan encontrar en los demás libros.
El saber que contiene es superior a los conocimientos adquiridos a través de estudios universitarios.
Caminar hacia un mundo nuevo donde lo primordial sea el amor, es la mejor enseñanza que se puede recibir de él.
El ser humano ha nacido para amar y ser amado. Por eso busca constantemente el árbol de la felicidad en el libro eterno de la vida.

El orgullo envilece al ser humano, transportándolo por los senderos de la infelicidad. Quien no descubra que es precisamente la humildad la que ensalza a las personas por encima de sí mismas, es que no ha leído bien el libro de la vida.
La insatisfacción nace de hacer lo que no se desea. En cambio, el gozo nace de dedicarse a aquello para lo que cada uno ha sido creado. Por tanto, se podría decir que el gozo es el paso del descubrimiento de sí mismo hacia la plenitud auténtica del alma. Quien pueda saborear esto algún día, podrá decir que al fin ha sabido leer correctamente ese vital libro.
El mayor deseo de la humanidad es sentir paz permanentemente, pero para algunos es casi una quimera, pues al pretender ir por el camino que lleva hacia la materialidad, lo único que encuentran es desasosiego y nerviosismo. Estos últimos se diría que han leído de derecha a izquierda y no de izquierda a derecha, como sería de suponer, los renglones del libro que nos ayuda a vivir en paz y armonía con nosotros mismos y con el prójimo. |